Koldo y Clara están hechos el uno para el otro. Van a celebrar su enlace acompañados de sus seres queridos. Pero una negra sombra se cierne sobre ellos. En el día más feliz de sus vidas, el infierno va a desatarse. Precuela de la saga de terror [•REC]. (FILMAFFINITY)
Soy un fan declarado de esta saga. Nunca olvidaré cuando fui a ver Rec al cine sin tener ni idea de lo que me iba a encontrar… qué hora y media tan intensa viví. Hacía tiempo que no experimentaba las sensaciones de agobio, tensión y miedo juntas. Y además, descubría a la gran Manuela Velasco, desde ese momento mi scream-queen española favorita. Luego llegó Rec 2, que, a pesar de no contar con el factor sorpresa de la primera (algo lógico, por otra parte), la disfruté casi tanto como la primera. Y, al contrario que mucha gente, me pareció genial el giro que le daban al argumento (estoy harto de virus y zombies), dando paso a lo paranormal sin ningún rubor.
Al enterarme de que iban a realizarse 2 películas más, pero cada una dirigida por un director en solitario, me entró una duda: ¿sabrán manejarse por separado, cuando siempre lo han hecho juntos? Pues bueno, por ahora conocemos lo que ha hecho Paco Plaza, y no está nada mal. Olvidaros del ambiente claustrofóbico, de la oscuridad, de la visión nocturna… de las 2 primeras. La acción de la película se desarrolla en un banquete de bodas, con su música, sus invitados, sus novios… nada que ver. Olvidaos también de explicaciones rebuscadas y aclaratorias o de sorpresas de última hora (no nos olvidemos de que es una precuela). Rec 3 es un festín en el más amplio sentido de la palabra. Festín sin complicaciones. ¿Y por qué no? Paco va al grano: acción, humor negro y sangre a partes, más o menos, iguales.
Los que echáis de menos a Manuela, no os preocupéis, tenemos a una dignísima sucesora, Leticia Dolera. Su personaje de frágil novia reconvertida en mata-zombies cabreada (todo un clásico) es genial. Hay más personajes (John Esponja, el novio…) pero ella es la prota.
Me hubiese gustado que indagasen en la historia de la niña de Medeiros y que nos salpicasen con más escenas gore como las de la sierra eléctrica o la batidora, pero bueno, su falta de pretensiones, su ritmo, sus diálogos ocurrentes y su rotundo final, compensan moderadamente todo lo anterior.
No sé si es del todo acertado el repentino cambio en la forma de grabar todos los acontecimientos… va a ser que me gusta la cámara subjetiva, oye.
Es la peor de las tres, pero me sigue pareciendo una de las sagas más interesantes de los últimos años.
7/10
