lunes, 3 de junio de 2013

STITCHES (2012)

Stitches, Conor McMahon




Otra película que se puede ver estos días en Nocturna (hoy a las 22:30h).

¿A quien no le dan (o le han dado) miedo los payasos? Después de ver el clásico It, los payasos dejaron de ser amigables y simpáticos para mí. Si me encontrase uno en el portal de mi casa, lo último que haría sería reírme. Muchas películas han continuado con esa imagen de payaso aterrador, pero no es el caso del payaso de Stitches, desde el minuto uno queda claro que esto es una comedia no muy negra, más bien burda. Con mucha sangre, sí, pero sin rastro de tensión o misterio.


Si en una película que se supone es de terror,  optas por la comedia gruesa, debes tener cuidado con los gags y con la historia, porque si el 80% de los chistes son facilones y no cuentas absolutamente nada nuevo (ni siquiera mediante variantes de lo conocido), corres el riesgo de que te salga una película como Hatchet (I y II), sin chispa y finalmente cansina. Stitches sigue exactamente esta misma línea, solo que en Irlanda en vez de EEUU, lo cual debería dar un toque algo más exótico a la función, pues ni eso, parece una película americana en fondo y forma (¿no podíais hacer una fiesta de estudiantes de 16 años menos americanizada?). Y eso que al comienzo, sentí una leve esperanza por encontrarme con un argumento delirante y disparatado, pero desgraciadamente no explotaron para nada lo de la secta de payasos (o lo que fuese).


Los efectos especiales de toda la vida están algo conseguidos, pero los digitales son bastante pobres.

Como es de esperar, lo mejor son las muertes, gráficas y exageradas (pobre gatito...), pero es insuficiente para contrarrestar todo lo demás, resultando una película intrascendente y olvidable, que no hace mucha gracia.

Resumiendo, un quiero y no puedo, una película que no se suelta la melena como se merece, más incorrección sería bienvenida. Mucho gore, pero desperdiciado (y mucho espacio entre cada muerte). Demasiado tópico comprimido en escasos 90 minutos y un payaso que ni da miedo, ni risa.



Y como en cualquier comedia americana que se precie, no pueden faltar las tomas falsas en los créditos finales.



3,5/10

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